Reflexionar sobre cómo proyectar un futuro sostenible para nuestro planeta es una tarea ardua, por tanto debemos comenzar por identificar recursos, como energías renovables, con el propósito de frenar el abuso con la naturaleza que realizamos permanentemente en el planeta.
La perspectiva del mundo que queremos debe enfocarse mucho más en la comprensión de una visión biocéntrica y menos antropocéntrica, porque perpetuar la creencia de que la naturaleza está a nuestro servicio es desconocer la interacción permanente que tenemos con nosotros mismos, otros sujetos y su entorno y peor aún ignorar cómo nuestras acciones finalmente transforman la realidad.
Quizá necesitemos más de un día para considerar la responsabilidad y el compromiso que tenemos los seres humanos de promover la armonía y lograr el equilibrio con el cosmos. (Claudia C. Pinzón R.)